Big things have small beginnings: el futuro de la proteína vegetal

By Zyrcular Foods

En la primera década de los 2000, los productos plant-based estaban pensados solo para consumidores vegetarianos y veganos. Existía poca demanda y poca variedad de alimentos, mientras que ni los sabores ni las texturas estaban bien conseguidos.

Además, era muy complicado encontrar proteínas alternativas en los supermercados: el consumidor interesado en ellas tenía que comprar en establecimientos especializados.

Los principios siempre son difíciles. Las pequeñas startups que empezaban a adentrarse en este terreno se encontraron con un enorme muro de impedimentos. No tenían visibilidad, ni medios económicos, ni tampoco contaban con un especial interés por parte del público mayoritario.

Sin embargo, en menos de una década, se ha producido un cambio substancial: las ventas de productos plant-based se han duplicado. Aun así, a día de hoy las alternativas a las proteínas de origen animal representan solo un 0,7% del mercado europeo. El futuro del sector está lleno de posibilidades.

ING ha analizado el crecimiento de los alimentos plant-based y sus perspectivas de mejora en el estudio Big things have small beginnings. A continuación, desgranamos las conclusiones de esta publicación.


Un enorme potencial de crecimiento


Aunque la popularidad de la plant-based meat se ha incrementado notablemente en esta última década, todavía queda camino por recorrer. En concreto, hay tres retos a tener en cuenta.


El primero es la distribución de estos productos. En las zonas urbanas están muy presentes, pero sigue siendo difícil encontrarlos en establecimientos de áreas más rurales. En los próximos años, se prevé mejorar la distribución y que estén disponibles también en las regiones menos pobladas.


Otro reto por resolver, sobre todo a nivel comunicativo, se centra en las dudas nutricionales. El estudio de ING ha detectado que a los consumidores les inquieta leer una larga lista de ingredientes en el envase de los productos plant-based procesados. Cabe recalcar que precisamente se mezclan distintos tipos de proteínas vegetales para lograr un alimento nutricionalmente completo.


El último reto es a nivel generacional. El informe es claro en este sentido: los jóvenes están más dispuestos a consumir nuevas formas de proteínas vegetales y están más contentos con el sabor y la textura de estos productos, pero los más mayores, acostumbrados al sabor cárnico, siguen teniendo reparos.

Por lo tanto, el reto está en conseguir que los productos plant-based sean más atractivos para la mayoría de consumidores, y no solo para la juventud flexitariana.



 


Horizonte 2025: un futuro prometedor


Cada año, las ventas de productos plant-based crecen un 10%, y la previsión es que este crecimiento siga el mismo ritmo hasta 2025. Para entonces, las proteínas vegetales representarán un 1,3% del mercado alimentario europeo y generarán 7500 millones de euros.


Además, se espera que los precios de las proteínas alternativas bajen un poco en cinco años, con lo que la barrera del precio ya no será un impedimento para comprar los nuevos productos vegetales.


El mayor consumo de productos plant-based conllevará una mayor competencia entre las distintas marcas, lo que incentivará la bajada de precios. Además, se prevé que no hará falta gastar tanto en marketing, porque los consumidores ya estarán familiarizados con estos alimentos.


De hecho, en países como Inglaterra, donde estos productos son más populares, no hay prácticamente diferencias de precio entre una hamburguesa cárnica y una hamburguesa plant-based. Por lo tanto, se espera una tendencia similar en países como España, donde el flexitarianismo todavía no está tan arraigado.

En materia de ingredientes, aunque la soja y el trigo seguirán teniendo protagonismo, la proteína del guisante irá ganando cada vez más terreno en el mercado plant-based.



Nuevos retos para las startups


Las startups han sido las primeras en interesarse por los productos plant-based, pero, cada vez más, las grandes empresas están incorporando proteínas alternativas a su catálogo de productos. Big things have small beginnings, y lo que empezó como el sueño de unos pocos, se ha convertido en una auténtica forma de vida. Y esto no ha hecho más que empezar.


Así pues, las nuevas startups lo tienen cada vez más difícil para competir en el mercado. Por un lado, queda mucho camino por recorrer y mucho campo por investigar, por lo que se pueden obtener importantes beneficios en un sector con tantas perspectivas de crecimiento.


Por otro, en cambio, para las grandes empresas tradicionales es más fácil obtener visibilidad: ya tienen su puesto asegurado en el lineal del supermercado y, además, los consumidores ya las conocen. La solución pasa por tender puentes y establecer alianzas entre startups y grandes marcas.

En Zyrcular Foods, estamos buscando las startups más innovadoras y disruptivas para afrontar nuevos retos. Ofrecemos las infraestructuras, la solvencia y la experiencia en seguridad alimentaria indispensables para poder hacer realidad los proyectos más ambiciosos y creativos. Te ayudamos a seguir creciendo.